María Arribas es directora de Marketing y Desarrollo de Negocio en Qaleon, una firma tecnológica creada en España en la que la mujer tiene un papel importante, dado que, a diferencia de muchas empresas de este sector, aquí hay mujeres en la cúpula y en la toda la escala del organigrama. Y esa es una de las cosas que María destaca de la compañía.
Nuestra protagonista tiene una trayectoria impresionante vinculada a la comunicación y a la estrategia, pero también a la sostenibilidad y a la innovación en todos sus niveles. Es profesora en EAE en el MBA Sustainability Management, fundadora de getHERtalent (luego os contamos qué es) y ha pasado por varias consultoras y departamentos de marketing y comunicación. Hoy nos cuenta qué hacen diferente en Qaleon, por qué está ella en esta compañía tecnológica y qué se puede hacer en este mundo para ser más sostenibles. A todos los niveles. Y nos lo cuenta con una simpatía que hizo que la conversación durara un buen rato.
Aquí va.
Me siento muy identificada con una frase de Madelene Albrigth que decía que «en el infierno hay un lugar especial para las mujeres que no ayuden a otras mujeres»
Del 1 al 10 ¿cómo de sostenible te consideras?
Risas. Si hablamos de sostenibilidad diría que un nueve. Para mí la sostenibilidad no es simplemente la medioambiental. Para mí ser sostenible es empezar a desarrollar una actividad profesional que sea rentable para que de ella puedan vivir todas las personas con las que trabajas. Ese primer grado de sostenibilidad es por el que me levanto todos los días y me acuesto por la noche. El segundo es la sostenibilidad social. Es importantísimo porque supone cómo metemos en este engranaje a los empleados, a los distintos valores y culturas y cómo podemos hacer una especie de convivencia en la que todos nos encontremos relativamente a gusto. Cómo se trata a las personas dice mucho de cómo son las empresas. Considero que actualmente vivimos una época de bonanza en cuanto a la valoración del talento, independientemente del género. Vamos consiguiendo avances, aunque aún queda mucho por hacer…
A nivel de sostenibilidad medioambiental creo que tenemos que aportar todo lo que podamos en nuestro día a día a nivel personal y también de nuestra actividad profesional, para dejar un mundo mejor del que nos hemos encontrado. Esta es mi filosofía de vida y por lo que me esfuerzo a nivel profesional como personal.
¿En qué aspecto social o ambiental te has involucrado más y qué crees que te ha llevado a ello?
Me he involucrado mucho en todo lo que tiene que ver con el talento, y con el talento femenino en particular. Yo soy de una generación en la que nos educaron en la filosofía de “si me esfuerzo y trabajo mucho llegaré a donde quiera”. Cuando salías de la universidad te dabas cuenta de que, realmente, no había grandes diferencias de género, pero cuando te encontrabas el reto de formar una familia empezaban a cambiar mucho las cosas. La maternidad suponía un frenazo en el desarrollo del talento femenino. Lamentablemente, he visto desaparecer mucho talento femenino por las dificultades con la conciliación.
Era algo que me pesaba mucho porque creo que en la igualdad de oportunidades reside el equilibrio real de la sociedad, por eso decidí lanzar una iniciativa que se llama “getHERtalent» que es una plataforma de innovación social que facilita un match entre mujeres cualificadas que buscan una flexibilidad laboral con empresas que tienen distintos tipos de proyectos que ellas pueden realizar. Ese es mi gran salario emocional y a lo que le he dedicado tiempo, cuerpo y alma. Esto lo he complementado con hacer mentoría a mujeres, hacer cursos para reseteo de las debilidades digitales, etc. Me siento muy identificada con una frase de Madelene Albrigth que decía que «en el infierno hay un lugar especial para las mujeres que no ayuden a otras mujeres».
Si tuvieras que elegir una organización benéfica, ¿cuál sería? ¿Cuál es tu referente en el campo de la sostenibilidad?
Yo he colaborado con muchas organizaciones dedicadas a la visibilidad y al desarrollo profesional del talento femenino. Soy parte del Proyecto Promociona, Programa Ejecutivo de Mujeres en la Alta Dirección, una iniciativa de la CEOE y de ESADE para la mujer, y también colaboro con ellos como embajadora, pero siempre desde una perspectiva que salvaguarde mi independencia en la que pueda decir lo que crea y pienso en determinados momentos. Tenemos actualmente políticas bastante descafeinadas. Creo que, desde la educación, se pueden decir las cosas y que, a lo mejor, así adelantaríamos más… si llamáramos a las cosas por su nombre. Colaboro con fundaciones a nivel de sostenibilidad donando mi tiempo, ayudándoles de manera profesional. Por ejemplo, con la iniciativa de voluntario solidario de ESADE, en la que dono mi tiempo.
¿Cuál es el hito más importante de tu empresa en temas de sostenibilidad?
Nosotros somos una empresa tecnológica que hace proyectos de explotación del dato, (lo que se conoce como Business Intelligence) e Inteligencia Artificial. Estamos especializados en el análisis avanzado, al análisis predictivo, reconocimiento de imagen y procesamiento del lenguaje natural. Las soluciones que desarrollamos siempre tienen un prisma de sostenibilidad ya que utilizamos la Inteligencia Artificial (IA) extrayendo el máximo valor del dato (Data Value), para preparar a las empresas para el futuro, creando flujos de datos inteligentes para la automatización de procesos y el análisis predictivo, con nuestros propios algoritmos de IA.
Tenemos soluciones SaaS (Software as a Service) que hemos desarrollado, no simplemente de explotación del dato sino de análisis predictivo, para poder ayudar a las empresas a realizar el informe no financiero y planes estratégicos de sostenibilidad, incluyendo eficiencia energética y la reducción de huella de carbono de alcance 3. Otra de nuestras soluciones ayuda a las empresas al diagnóstico de auditorías salariales para controlar aspectos como la igualdad retributiva o nuestra solución en diversidad que facilita a las empresas conocer el grado de madurez en diversidad.
¿Cómo ha evolucionado Qaleon en temas de sostenibilidad?
Qaleon nació con un enfoque people-Centric que incluía incorporar la flexibilidad y el teletrabajo en los contratos ya antes de la pandemia, y sobre todo con un enfoque sostenible. Es una empresa que tiene una CEO mujer, Maria J. Alonso, y la mayoría de los dirigentes son mujeres. Hay un equilibrio de un 49% de hombres y 51% de mujeres. Tratamos de cuidar mucho esto porque sabemos lo difícil que es en el ámbito tecnológico encontrar a mujeres y darles visibilidad. Lo tenemos muy en nuestro ADN.
¿Cuál es el próximo reto?
Nuestro gran reto ha sido desarrollar una solución que se llama Empleable que pretende ayudar a mejorar la empleabilidad y el impulso del talento en las organizaciones a través recomendaciones de itinerarios formativos personalizados mediante la inteligencia artificial. La herramienta hace un match de las hard skills y extrae las soft skills para que el talento pueda elegir dónde quiere llegar, qué meta profesional quiere alcanzar y, de esa manera, proporcionar planes de carrera profesional. Lo hemos lanzado debido a la escasez de talento. Porque hay una diferencia entre el talento y la fuerza laboral. Tienes que proponer desarrollo de talento para que el talento te elija a ti y puedas hablar de fidelizar.
Ahora estamos impulsando el go to market de Empleable y empezando nuestra internacionalización, que como reto no está nada mal. Somos una pyme innovadora o una startup tecnológica que está en el momento de poder escalar. El mercado se mueve muy rápido y el tecnológico mucho más. Todos nuestros esfuerzos tienen que estar dedicados a consolidarnos aquí y crecer tanto dentro como fuera.
Si no hubiera un freno temporal o económico, ¿qué reto afrontaríais?
Podríamos adquirir recursos mayores en talento. El talento hay que pagarlo y nosotros tenemos muy claro que supone una inversión por lo que nos aseguramos de contratar cuando podemos mantenerlo en el tiempo. Para nosotros el talento es importante porque es lo que nos ayuda a marcar la diferencia, más allá de la tecnología, que es una gran herramienta de apoyo para llegar más lejos. Con todo el dinero y el tiempo del mundo el plan de Internacionalización sería distinto. El enfoque estratégico sería el mismo, pero lógicamente, iríamos más rápido.
¿Cómo motivamos a las empresas para que os vean como partners sostenibles y profesionales?
Lo importante primero es que nos conozcan. Eso te ayuda a labrar esa relación de confianza. Nosotros estamos muy centrados en la calidad y los clientes que han trabajado y trabajan con nosotros lo destacan. Una cosa que nos diferencia es el enfoque ético del uso de datos respetando la privacidad y la anonimización de los datos. Para nosotros es esencial cuidar esa protección y saber que el dato es de nuestro cliente y que éste sepa que nosotros no vamos a hacer un uso indebido. En segundo lugar, las empresas tienen que entender que la IA requiere una inversión importante de tiempo para que se desarrolle sin sesgos y que se convierta en un compañero o un apoyo sin generar un riesgo para las personas ni para la sociedad en general.
En plan Orwelliano, en 2084, ¿cómo te imaginas tu empresa?
En el sector de la tecnología la pregunta es muy futurista. Si en un año la tecnología cambia, imagínate de aquí a 2084… En Qaleon seguiremos haciendo tecnología, pero seguramente lo que estaremos desarrollando no será lo que estamos haciendo ahora. Será mucho más evolucionada, pero siempre con el apoyo de las personas. La tecnología sin las personas no es nada. Yo entiendo que, en 2084, Qaleon estará en el mercado de manera muy sólida y con una trayectoria importante. Yo no lo veré, pero espero que sea tecnología, innovación y sostenibilidad a un nivel exponencial.