Para ahorrar energía en casa, fíjate en estas tres cosas

Ahorrar energía

Ahorrar energía en casa va ligado al concepto de ecoeficiencia, es decir, el equilibrio que existe entre impacto ambiental que ocasionamos y beneficio que logramos con ese impacto. 

Por ello, hay que fijarse en varias cosas en las distintas zonas de la casa como habitaciones o ventanas, y ver el tipo de climatización que tenemos.

Aunque vivamos en una casa o piso cuya construcción fue realizada hace años, y esté en una ciudad con un menor acceso a los recursos naturales que otras zonas, lo cierto es que podemos aplicar numerosas mejoras y estrategias que nos ayudarán a reducir el coste tanto de la huella ecológica que causamos, como de nuestras facturas.

cocina eficiente[Foto de Naomi Hébert en Unsplash]

En lo que a la climatización de casa se refiere, y más concretamente, al bioclimatismo,  el aprovechamiento solar, fluvial, eólico y geotérmico son clave. Por ejemplo, la orientación norte-sur será la mejor opción para casas en zonas de climas fríos o templados. Es decir, la fachada y ventanas principales se colocarán al sur y los servicios de la casa como caldera o cuadro eléctrico, al norte. 

Otro ejemplo es instalar alerones o toldos sobre las ventanas y cuya inclinación esté bien estudiada para que nos proteja de la fuerte radiación solar que hay en verano, mientras que en invierno podremos moverlos y aprovechar dicha radiación.

ventanas eficientes[Foto de Toa Heftiba en Unsplash]

Ventanas

Piensa que para ahorrar energía en casa, el aislamiento térmico del edificio será tan bueno como lo sean sus ventanas ya que en ellas se produce el mayor intercambio de temperatura entre interior y exterior. Si nos estamos planteando hacer una inversión en ventanas nuevas, esta será la mejora más efectiva como medida de ahorro, y además, su amortización es rápida.

Lo mejor será que para la carpintería, usemos madera por su capacidad aislante, y en cuanto a los vidrios, que son los que mantienen mejor la temperatura, independientemente de la que haya en el exterior, pongamos cristales aislantes de doble o triple vidrio o dobles ventanas.

ventana energía[Foto de Rob Wingate en Unsplash]

Climatización

Si hemos seguido las anteriores pautas con las ventanas,habremos ayudado al bioclimatismo de la casa, por tanto nuestra demanda energética en cuanto a calefacción y aire acondicionado se verá considerablemente reducida. 

A partir de aquí, podemos plantearnos incorporar un sistema que funcione con energías renovables y que pueda climatizar los espacios por radiación como por ejemplo, las estufas de obra o la calefacción de suelo. También los muros y techos radiantes son una gran opción.

chimenea eficiente[Foto de Kyle Mackie en Unsplash]

Distribución

En el momento de distribuir o redistribuir los espacios interiores, es importante que estudies con detenimiento cada caso particular. Las peculiaridades del emplazamiento de tu casa, el clima, los usos y las preferencias personales de quienes la habitan.

A partir de aquí, y como criterio general intentaremos ubicar las zonas de día como el salón, el comedor y la oficina en la fachada sur, ya que es la que recibe más horas de luz. 

Los dormitorios, por el contrario, funcionan muy bien orientados al este porque podrán recibir el sol a primera hora de la mañana. 

La fachada norte es perfecta para ubicar los espacios no calefactados como la cocina, el aseo o la escalera porque tiene menos horas de calor directo, y además funcionara como tapón amortiguando la diferencia térmica con el exterior. 

En la fachada oeste recibiremos el sol de tarde, por lo que podemos colocar en esa orientación los espacios que tengamos la costumbre de habitar en esa franja del día como la sala de juegos o la zona del salón. Incluso, en ausencia de una orientación mejor en nuestra vivienda, las zonas de día.

fachada eficiente[Foto de Christian Koch en Unsplash]

Una vez tratadas estas medidas de base, el ahorro energético en nuestro hogar será patente, pero también lo será nuestra menor huella en el planeta. No obstante, son importantes otros factores como las instalaciones de agua y luz, la elección de los electrodomésticos y un cambio en nuestros hábitos, para que seamos, desde el punto de vista bioclimático, lo más responsables posible. 

Redacción The Reason Behind