Con la llegada de la primavera llegan los cambios de armario.
Si tienes hijos mayores, seguramente saques algún montón de ropa de alguna caja guardada en algún lugar olvidado para intentar aprovechar lo que ya tienes, a ver qué es salvable. Pero, si no tienes hijos mayores o las épocas invierno-verano no te coinciden, seguramente te toque hacerte con un surtido de piezas adaptadas a su edad, a la temporada y a la sostenibilidad.Descubre los consejos para disfrutar de la ropa de segunda mano en la moda infantil
Yo vengo hoy con la intención de ofrecerte algunas alternativas al acto reflejo de presentarnos en aquella tienda en la que sabemos que encontraremos muchas cosas y bien de precio. Descubre los consejos para disfrutar de la ropa de segunda mano en la moda infantil
Voy a empezar con una frase muy extendida entre las y los greenfluencers: “No hay nada más sostenible que lo que ya existe”. ¿Y con esto qué quieren decir? Básicamente, que, si aprovechamos la ropa que ya ha usado alguien con anterioridad, evitamos generar tanta demanda nueva a las marcas y, por consiguiente, estas tendrán que ver reducido su volumen de producción, que es el mayor problema al que nos enfrentamos en el mundo de la moda.
Se produce demasiado. Y no todo se consume. Pero sale más barato producir 1.000 piezas de un modelo, que 50. Y lo que no se vende, se tira. Pero, como ya te he comentado en otras ocasiones, lo que a las marcas les sale barato, a nosotros (nuestra generación y la venideras) nos está saliendo muy caro.
Un armario circular promueve el intercambio, la reutilización y el reciclaje de prendas de ropa para reducir el desperdicio y el impacto ambiental asociado con la industria de la moda. En lugar de seguir el modelo tradicional de «usar y tirar», en un armario circular se busca alargar la vida útil de las prendas mediante prácticas como la compra de segunda mano, el intercambio de ropa con otras personas, el alquiler, la reparación y el reciclaje.
La idea fundamental detrás de este enfoque es crear un ciclo continuo en el que las prendas se utilicen y reutilicen tantas veces como sea posible antes de ser desechadas, minimizando así el impacto ambiental negativo y promoviendo un consumo más responsable. Este enfoque también fomenta una relación más consciente con la moda, alejándose de las tendencias pasajeras y valorando la calidad, la durabilidad y el estilo atemporal.
Históricamente se ha venido creando una mala fama alrededor del consumo de ropa de segunda mano: desmontemos estos mitos
Baja calidad
Hoy en día existen numerosas plataformas a las que acceder para comprar ropa secondhand. En algunas, es la propia empresa la que se encarga de que la ropa está en perfecto estado para ser usada de nuevo. En otras, te informan de su estado, si tiene algún roto, alguna mancha imposible de quitar, etc., y si no estás de acuerdo, la puedes devolver.
Higiene
Aplica lo dicho en el punto anterior con la salvedad de que, independientemente de que las prendas vengan limpias o no, cuando hablamos de niños, siempre conviene lavarlas antes de ponérselas.
Prendas pasadas de moda
Por desgracia, el ritmo de consumo que llevamos (hablo en general) es tan frenético que las modas duran un suspiro. El otro día leía que ir a la moda ha dejado de ser una expresión de un grupo social para convertirse en puro producto de consumo. Y vuelve a estar de moda lo vintage. Esta ya es mi opinión, pero, cuando visto a mis bebés, les visto con lo que a cada uno de ellos le sienta mejor, con lo que están más cómodos y que a mí me entre por los ojos, independientemente de cuándo se diseñó o cuándo se confeccionó.
Estigma socioeconómico
Creo que pensar que alguien compra ropa de segunda mano por falta de recursos económicos sí que ha pasado de moda. Lo estamos venciendo. Con independencia del poder adquisitivo, una persona que decide consumir ropa usada tiene una conciencia absoluta sobre las causas y consecuencias de sobre consumir, es decir, consumir más allá de sus necesidades reales. Que no quiero decir que consumir sea malo, pero sí es importante elegir cómo hacerlo.
Como dato, me llama la atención que la mayor plataforma online de compra y venta de segunda mano haya registrado un aumento en la demanda de moda y complementos del 74,7 % en 2023, con una valoración económica de 45,5 millones de euros. A lo que habría que sumar la demanda del resto de plataformas online y tiendas físicas. Y esto no hace más que crecer año tras año.
En este artículo te hablo sobre mi experiencia personal a la hora de comprar ropa de segunda mano para mis hijos. Por si quieres echarle un vistazo.
Ahora sí, te dejo algunas alternativas al consumo tradicional que nos van a ayudar a crear ese armario circular para nuestros peques, a nuestra medida:
No tengamos miedo a que nos presten ropa. Quédate con lo que creas que vas a usar, y lo que no, lo devuelves. Si por el motivo que sea no lo quieren, búscale una salida. Igual alguien que conozcas lo quiere. Pero sigue leyendo, seguro que con lo que te cuento, algo se te ocurre.
Resístete a comprar, opta por la solución de alquilar. Sí, también está esta opción para bebés.
Los bebés y los niños son un grupo en constante crecimiento y apenas tenemos tiempo para ponerles la ropa antes de que se les quede pequeña. Y la que les ponemos, apenas se usa. Por eso Patricia creó Lapona, porque creía firmemente que alquilar ropa infantil es una solución para que las familias dejen de acumular, reduzcan el presupuesto que destinan a la ropa de los hijos y puedan ir renovando el armario de los más pequeños de la casa. Sus clientes destacan:
-Es un servicio muy sostenible para las familias.
-Es la primera empresa en ofrecer este servicio en España y con más importancia. – Es práctico y fácil recibir ropa e intercambiarla a medida que crece el bebé sin necesidad de ver la ropa que te falta. Lapona es una extensión del armario de sus bebés.
-Los peques van a la moda con ropa de altísima calidad.
Si no la conoces, te invito a bichear las redes y la web de Lapona. Tal y como me comenta Patricia, “nosotros lo hemos visto claro este año 2023 cuando en eventos presenciales ya no nos preguntan como si fuéramos «aliens» sino que preguntan cómo funciona Lapona, pero no se les hace extraño que se alquile ropa de niños.”
Como ella, otras plataformas en las que poder alquilar ropa infantil: Pipalook, Mes P’tits Pioupiou.
Te animo aprobar, pero si lo de alquilar no es lo tuyo, tienes la opción de comprar con la misma filosofía en mente. Hay plataformas especializadas en moda infantil de segunda mano y cada vez más marcas están ofreciendo este servicio en sus propias webs, como Playup, por ejemplo.
Además de en Vinted, Wallapop, etc., puedes echar un vistazo a estas plataformas de venta de ropa pre-loved infantil: Lino, Apple of my eye, Micolet.
El otro día leía en redes un comentario que me encantó por su naturalidad y porque me llenó de esperanza…
“¿Estás en Vinted? Esta primavera voy a llenar mi armario con la ropa de tus hijos.”
Y ya, por último, te dejo la idea de organizar una Swap Party o un evento de intercambio de ropa. Es fácil, te permitirá encontrar ropa que necesitas y verla en directo y, además, podrás deshacerte de todas las prendas de tus peques que ya no necesitas. Seguro que alguien se las lleva con mucha ilusión.
Me encantaría que estas ideas te sirvieran de inspiración. Las utilices ahora o no, ya sabes que están ahí para cuando te animes. Y si se te ocurren más que, seguro que hay, compártenoslas y así entre todos podemos ir creando nuevos caminos hacia una moda más sostenible.
Gracias, como siempre, por leerme. Que tengas un precioso día.