Vaqueros orgánicos: Kuyichi

En el año 2000 los fundadores de Kuyichi viajaron a Perú para conocer la industria del algodón local, y quedaron impresionados por la contaminación y pobreza que encontraron.

Decidieron empezar a colaborar con granjeros locales y el resto de la cadena logística necesaria para producir algodón orgánico y justo, pero ninguna marca estaba interesada en comprarlo por su alto precio.

Propia marca de vaqueros orgánicos

Ante esta situación, tomaron la decisión de empezar su propia marca de vaqueros orgánicos al ser el producto más común fabricado con algodón, y también uno de los más contaminantes. De esto modo, se convirtieron en la primera marca de vaqueros orgánicos del mundo.

Hoy en día fabrican más productos y todos ellos están hechos con materiales reciclados y orgánicos, y están fabricados por personas que reciben un trato y un pago justo. Para asegurarse de que esto sea así, Kuyichi presta mucha atención a la hora de seleccionar a sus proveedores.

Miembros de Fair Wear Foundation

 Desde Enero, son miembros de Fair Wear Foundation, para tomar responsabilidad y trabajar aún más duro para que cada trabajador tenga un salario digno en toda la cadena de suministro.

Algodón orgánico

Todo el algodón que utilizan es algodón orgánico, no contiene pesticidas. La creación de hilo orgánico genera un 60% menos de emisiones de CO2 que el convencional, y es mejor tanto para la piel como para los trabajadores que lo tratan.

Atemporales

 Los productos de Kuyichi son atemporales, el objetivo es que los vistas el mayor tiempo posible y no comprar constantemente, además no hace rebajas para incitar a la compra, y su apuesta por el reciclaje es clara, tienen incluso una línea de vaqueros fabricados a partir de viejos vaqueros. Cada vez buscan más materia prima reciclada porque, además, les permite reducir muchísimo el consumo de agua que requieren los vaqueros.

Para 2020 se han fijado como objetivo

Para 2020 se han fijado como objetivo calcular qué huella hídrica dejan con su producción. Para ello están trabajando junto a Water Footprint Implementation para poder entender cada parte de la producción que genera este impacto, y poder así mejorarlo.

El único modo de conseguir certificar los productos es trabajando con proveedores que tienen dichos certificados, lo que les permite poder medir el impacto ambiental de tus productos. Los certificados que más utilizan son GOTS, algodón orgánico; OEKO-TEX 100, restricciones químicas; y diferentes certificados sobre reciclaje y contenido orgánico.

 

Toda esta forma de trabajar y los valores de la marca la trasladan incluso a sus propias oficinas, donde toda su energía es 100% renovable, y compensan su consumo de calefacción con la iniciativa Justdiggit, que se dedica a capturar agua de lluvia para volver a hacer fértiles tierras secas en África.

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