Si las generaciones futuras tienen un mundo mejor, será, en parte, gracias a personas como nuestro entrevistado de hoy. David García Núñez es director de Comunicación y Marketing del área de Construcción del Grupo FCC y fue elegido por dos veces entre los 100 directores de España más innovadores y creativos por la revista FORBES y uno de los 50 directores de comunicación más importantes de España por FORBES. Nuestro protagonista se dedica, en cuerpo y alma, en lo profesional y en lo personal, a evangelizar sobre sostenibilidad económica, social y medioambiental.
Porque, además de sus cargos oficiales, preside Madrid Capital Mundial, una entidad que nació en 2020 y que está compuesta por 187 compañías públicas y privadas. El objetivo de esta asociación es reforzar y construir marca Madrid, ser un polo de atracción para la inversión internacional en Madrid y, por último, que Madrid sea un referente en soluciones urbanas sostenibles. Un proyecto promovido por el Ayuntamiento de Madrid y Comunidad de Madrid.
Aquí os dejo nuestra conversación y, quien no se sorprenda con lo que nos cuenta, que me lo diga…
Todo el mundo piensa que la sostenibilidad se acaba cumpliendo los ODS o el compromiso de Cero Emisiones en 2050.
¡No! ¡Esto es mucho más!
¿Del 1 al 10 cómo de sostenible te consideras?
Yo me considero un 9. Soy una persona que desde pequeño tiene conciencia de que tenemos una situación que embarga a las generaciones futuras y que es nuestra responsabilidad, sin duda, dejar un mundo mejor del que tenemos ahora.
Siempre digo lo mismo: cuando uno vota lo hace para que las políticas que se están aplicando ahora mismo tengan su grado de afección para las generaciones futuras. Cuando uno trabaja en políticas medioambientales tiene que votar con esa conciencia, una conciencia compromiso con lo que queremos de nuestro país, planeta. Es el momento de sensibilizar, formar e involucrar a todo el conjunto social en la protección de nuestro entorno.
¿En qué aspecto social / ambiental te has involucrado más y qué crees que te ha llevado a ello?
Pues mira, hago muchas cosas: participo en jornadas de plantación de árboles, en jornadas de limpieza de playas y mares, etc. Hace tiempo que, además, soy socio de varias entidades ecologistas como WWF que, verdaderamente, asumen una responsabilidad sobre el medio ambiente y sobre la sostenibilidad y el mundo que vamos a dejar a las generaciones futuras.
¿Qué actividad te ha hecho sentir orgulloso en ese aspecto?
A nivel social hago una actividad que demuestra una auténtica vocación por el servicio público. Llevo desde los 18 años como voluntario técnico en emergencias sanitarias en el SAMUR.
Creo que el compromiso y la vocación pública es vocacional. Yo, a los 18 años, hice un curso en el SAMUR como técnico en emergencia sanitarias y, desde aquella fecha, estoy como voluntario en la ciudad de Madrid acompañando a un médico y una enfermera/o ayudando a los que más lo necesitan. Esto hace que no pierda la visión de la realidad de una gran urbe como Madrid. Sorprendente ¿a que sí? Risas.
Pues sí. ¡¡Mucho!! Y, David, si tuvieras que elegir una organización benéfica, ¿cuál sería? ¿Cuál es tu referente en el campo de la sostenibilidad?
A mí me gustan dos. La primera, la Fundación A la par que hace una labor sumamente necesaria, de integración, de igualdad y de responsabilidad, de personas con necesidades especiales o personas con unas capacidades especiales dentro de la sociedad. La segunda, como organización que siempre apoya la diversidad de la flora y fauna, SEO Bird Life, que hace una labor que a mí me gusta mucho en cuanto a la protección de la fauna.
¿Cuál es el hito más importante de FCC Construcción en temas de sostenibilidad?
FCC Construcción es una empresa líder y pionera en sostenibilidad. Dentro del sector fuimos los primeros en publicar una memoria de sostenibilidad. Es decir, fuimos los primeros en rendir cuentas a la sociedad de lo que era la actividad de la compañía. También fuimos los primeros en publicar un informe de gases de efecto invernadero en donde cuantificamos nuestra actividad y nuestras emisiones y las valoramos para, posteriormente, certificarlas. Hoy en día tenemos el 100% de nuestra actividad auditada y certificado.
Fuimos los primeros en ser la primera empresa constructora del mundo en unirse al Grupo de Finanzas Sostenibles de Naciones Unidas. Y, también, éramos la primera empresa española en sumarse a este grupo. Esto muestra que defendemos la actuación frente al marketing de otras compañías, defendemos la acción frente al anuncio.
La sostenibilidad tiene un prisma social, medioambiental y económico, lo que muchas veces se nos olvida. Ese prisma económico es el que analiza cómo hacer sostenibles nuestras finanzas para que todas las actividades que vamos a desarrollar sean sostenibles desde la génesis.
¿En qué ha cambiado hoy en día vuestra política de RSC de antaño?
Es verdad que hay un greenwashing por parte de algunas compañías alrededor del concepto de sostenibilidad y ello debemos evitar. Las buenas prácticas medioambientales las hacemos porque las necesitamos, porque es necesario no solo para ti, sino para tus stakeholders y el conjunto de la sociedad.
Quitando ese lavado de imagen que, erróneamente, muchas compañías hacen, hay que decir que el cambio sustancial se ha dado por dos factores:
- Uno porque hemos sido capaces de cuantificar lo que hacemos e introducir indicadores para medir resultados. Eso posibilita poner medidas preventivas y también correctivas para evitar el daño medioambiental.
- Y dos, porque, desgraciadamente, los efectos del cambio climático son palpables y el que lo niegue no es consciente de los desastres naturales dramáticos que estamos viviendo.
Evidentemente, la concienciación, las labores de difusión, la formación e información al conjunto social, junto con indicadores que nos permiten evaluar nuestra actividad y nos permiten, sobre todo, poner medidas, es lo que ha catapultado la implantación de estas medidas.
¿Cuál es vuestro próximo reto? ¿Cómo lo vais a encarar?
Sin duda tenemos dos retos importantes: el primero es seguir operando, pero integrándonos más en las comunidades locales en las que desarrollamos nuestra actividad. Tenemos que seguir creando nexos de unión con las comunidades locales en los más de 25 países en los que desarrollamos actividad. Y, por otro lado, tenemos que seguir avanzando en el desarrollo de KPIs financieros que nos permitan integrar esa actividad en el prisma social, el prisma económico social y el medioambiental.
¿Cómo motivamos vuestros clientes para que elijan vuestra opción por ser más sostenible?
Más que a nuestros clientes, a nuestros proveedores… A nuestros clientes les ofrecemos ser pioneros en una actividad como es la construcción, pero desde un punto de vista sostenible y de economía circular.
Pero, la cara B de todo esto es que en cascada tus exigencias y tus obligaciones en materia medioambiental sean muy altas y sean cumplidas por toda la red de proveedores locales e internacionales que forman parte de la compañía. Porque esto va a llegar a todo el tejido productivo: nuestros objetivos, nuestras obligaciones, nuestros compromisos… al trasladarlo a toda la cadena de producción en cascada vas a hacer que esos objetivos se cumplan, no solo para nosotros, sino, también, para ellos. Evidentemente, lo que se está generando es que ese ecosistema productivo sea responsable medioambiental.
En plan Orwelliano, en 2084, ¿cómo te imaginas FCC Construcción?
FCC construcción tiene 123 años de historia. En el futuro la compañía seguirá siendo pionera e irá por delante en el desarrollo de políticas y prácticas medioambientales, como ha venido haciendo durante toda su historia. La compañía estará más adaptada al mundo disruptivo y, por supuesto, seguirá liderando ese cambio que es necesario para dejar un mundo mejor a las generaciones futuras. Porque todo el mundo piensa que la sostenibilidad se acaba cumpliendo los ODS 2030 o el compromiso climático de Cero emisiones en 2050. ¡No! ¡Esto es mucho más! es mirar al futuro con proyección y ganas de mejorar el mundo en el cual vivimos.