Lo primero y esencial es entender que no hay una sola forma de lograr la sostenibilidad en la moda, ni tampoco existe una suerte de checklist para que podamos ir llevando control sobre los pasos que vayamos dando y así llegar a la meta de ser sostenibles. He ahí la cuestión. La sostenibilidad es un camino, no un destino.
Tenemos dos formas de ver la sostenibilidad: a nivel empresarial o a nivel de quien se viste (todos y todas). Ahora, hablaré desde el marco corporativo para así comprender algunas cuestiones básicas al momento de crear o transformar nuestra marca hacia un espacio de mayor balance e impacto.
Partamos de la base que toda empresa que busque ser sostenible, debe apuntar a crear un triple impacto positivo balanceado y paulatino en crecimiento. A continuación expondré qué aspectos debemos tener en cuenta en cada uno de esos impactos.
Ambiente
Cuando hablamos de cuidar el medio ambiente no es solamente plantar árboles y hacer una campaña en el mar. Buscamos que durante todo el proceso de producción, diseño, distribución y venta, se estén tomando las medidas correctas y específicas para reducir los posibles impactos que se puedan tener en el ambiente.
Debemos tener en cuenta entonces nuestras emisiones de gases invernadero, las políticas de consciencia ambiental de las instalaciones, los residuos, la circularidad de insumos, el cuidado del agua, la regeneración del suelo, los tipos de
energía, el uso de tecnología, las acciones con las comunidades, entre otros.
Sociedad
Los humanos somos quienes estamos impactando en nuestras vidas y las de otros seres vivos de este planeta prestado. Poner especial atención a todos los que hacen parte de nuestro emprendimiento se torna esencial para balancear nuestros impactos corporativos.
Algo importante a destacar es que el impacto social no solo apunta a mejorar la calidad de vida y de vida laboral de quienes hacen parte directamente de nuestro ecosistema empresarial. Sino también aquellos que nos rodean como la comunidad inmediata y nuestros clientes o usuarios.
Aquí debemos entonces apelar a tener políticas de bienestar laboral, salud, prestaciones, condiciones aptas para trabajar, espacios sin explotación, diversos, inclusivos en todas las áreas, productos que mejoren el bienestar de los usuarios, acciones comunitarias de mejoramiento del espacio público y cultural, entre otros.
Economía
La sostenibilidad no es hacer las cosas por amor al arte. Tampoco es centrar nuestras accionesen el activismo y nada mas. Estamos hablando de crear empresas de moda con impacto. Y ese impacto también debe estar enfocado en generar mejor calidad de vida para los seres que están directamente involucrados con nuestra compañía, y hasta mejorar las dinámicas
económicas de un territorio, por consiguiente.
El generar un rédito monetario, permitirá tener mayor músculo financiero para trabajar por las causas sociales y medioambientales, apoyar a nuestros trabajadores y mejorar la calidad de vida, los productos y las instalaciones, así como la
incorporación de apoyos y conocimientos que permitan una correcta sostenibilidad.
Recuerden que cada empresa está enmarcada en sus propios objetivos y el contexto geográfico, social y político específico que hace que los impactos sean personalizables.
VALENTINA SUÁREZ
Directora General Universo Mola
– Movimiento Internacional de Moda Sostenible Latinoamericana –
Experta en Sostenibilidad en Moda