La historia artesanal del archipiélago se mezcla con las tendencias de la actualidad para crear productos únicos a través de sus artesanos
Aunque las grandes industrias amenacen sus puestos de trabajo, los artesanos no desisten en su labor de fabricar productos minuciosamente cuidados. En las Islas Canarias, donde la presencia de los artesanos es muy numerosa, estos manufactureros continúan dedicando tiempo, mimo y esfuerzo a sus elaboraciones. Pero, a la vez que siguen el legado de técnicas ancestrales, se combinan con la vanguardia de las tendencias actuales. Por eso, encontramos un producto que mezcla historia y avance. Sigue leyendo para conocer a estos artesanos que apuestan por la sostenibilidad.
[Hp Koch en Unsplash]
Telares de seda
La industria de la seda en Canarias tiene una historia milenaria. Entre los siglos XVI y XVIII, La Palma llegó a contar con 60 industrias sederas y más de 3.000 telares que elaboraban tafetanes, sargas, medias, cintas y otros lienzos.
En los talleres todo se hace a mano y con productos de primera calidad. Los tintes que dan color a sus telas provienen de productos como la cáscara de almendra, de la nuez o de la piel de la cebolla. Y los hilos se extraen de capullos de gusanos de seda de la propia isla.
En La Palma no hay mecanización del proceso sedero (industria que trabaja la seda), aquí todo se hace a mano. Sus talleres están abiertos al público, desde los espacios donde se elaboran los telares, hasta las exposiciones donde ver piezas que han producido para diseñadores de alta moda como Manolo Blahnik.
[Foto de Carlos Saá en Diariodecanarias.es]
Cestería de junco
En el archipiélago siguen trabajando este oficio, pero cada vez son menos artesanos los que realizan la cestería de junco. El producto se elabora con materia prima de proximidad, reduciendo su huella de carbono a 0. No solo es un producto ecológico sino que además es kilómetro cero, lo que lo convierte en cien por cien sostenible: ni es contaminante, ni conlleva contaminación en su elaboración. “Tenemos en nuestra cultura un elemento que nos puede ayudar en esta transformación y lucha contra el cambio climático”, destaca Julián Rodríguez, investigador y maestro de la artesanía tradicional de Lanzarote y Fuerteventura.
Su técnica de artesanía en espiral revela que se trata de uno de los oficios más antiguos, pues este tipo deproductos, que parte de un nudo inicial y forma el llamado churro en espiral concéntrica a golpe de hilado, se considera hoy una de las más antiguas de las culturas ancestrales. El junco es un material muy resistente, con una durabilidad incomparable. señala Julián, que destaca que aunque “la artesanía vinculada al tema agrario desaparece a medida que desaparece la vida agraria, tiene una enorme adaptabilidad que debe ser atendida”.
Joyería volcánica
La orfebrería canaria destaca por la elaboración con piedras volcánicas, motivos únicos y muy variados. Las olas del mar, la vegetación, los animales marinos e incluso las siluetas de las islas son una rica fuente de inspiración para los artesanos.
[Foto del Instagram de Lava Fluir Canarias]
La marca canaria Fluir Canarias crea piezas únicas gracias a la lava volcánica. “De las profundidades de la tierra, nace para unirse al metal más elegante, la máxima expresión de la naturaleza”, así es como describen ellos mismos sus elaboraciones, que combinan este material volcánico con plata, ejemplos de la armonía entre los elementos de la isla.
Iniciativas para visibilizar la artesanía
Cada año se celebra en la localidad de Tinajo en Lanzarote, la Feria Insular de la artesanía, donde profesionales de la artesanía se reúnen para celebrar su cultura. La cultura artesanal de la isla recoge miles de años de tradición y productos elaborados con mimo y material de proximidad. Aunque el oficio de artesano es cada vez menos practicado, es crucial dar visibilidad a este gremio de personas que desarrollan una labor crucial para la preservación de la cultura canaria.