Alternativas sostenibles al cuero animal. La piel de animal ha sido durante siglos el material por excelencia para crear complementos de alta calidad por sus prestaciones, ya que ofrece las propiedades necesarias para que un calzado o accesorio sea duradero, transpirable, adaptable y flexible. Desde el punto de vista de sostenibilidad, la utilización de la piel puede considerarse un upcycling, ya que gran parte de la piel que se utiliza para la fabricación de complementos proviene de la industria alimentaria y, de no ser curtida para su utilización, sería un residuo.
Por otro lado, la mayor parte de la piel proviene del vacuno. Se estima que las 1.500 millones de vacas destinadas a la producción de alimento para el consumo humano liberan 100 millones de toneladas de metano (equivalente a 2.500 millones de toneladas de CO2) cada año. Independientemente de si somos vegetarianos, veganos o no, deberíamos, como consumidores responsables, disminuir nuestra ingesta de carne de vacuno y, por consecuencia, la piel de vacuno.
Otro aspecto a tener en cuenta es el proceso de curtición, ya que por cada tonelada de piel curtida se necesitan 50 metros cúbicos de agua. Además, en países donde no existe una regulación, como es el caso de la mayoría de países asiáticos, la piel se curte con productos tóxicos que causan daño tanto a las personas que trabajan en contacto directo con la piel como a su entorno una vez se desecha el agua utilizada.
Por estas razones, en los últimos años se han lanzado numerosos proyectos innovadores que tratan de ofrecer nuevos materiales como alternativas al cuero animal, respetuosos con el medio ambiente.
Innovaciones ecológicas en moda: materiales a partir de residuos orgánicos
Dentro de estos materiales se encuentran aquellos fabricados a partir de residuos orgánicos, como desperdicios de producciones agrícolas o de alimentos. A continuación, algunos ejemplos de las alternativas veganas a la piel disponibles en el mercado:
A partir de residuos de caqui
Persiskin es una iniciativa puesta en marcha desde la Comunidad Valenciana para dar salida al excedente de la producción de caqui de la región. Es un tejido elaborado a partir de los excedentes del caqui cultivado en las huertas valencianas, compuesto en más de un 85 por ciento por materiales naturales.
A partir de residuos de manzana. Alternativas sostenibles al cuero animal
La empresa de materiales de última generación Beyond Leather Materials, con sede en Copenhague, ha introducido una nueva alternativa llamada LEAP a partir de manzanas. Trabajan con productores daneses de jugos y sidra para reciclar los desechos de la industria.
A partir de pieles y pepitas de uva
Vegea es un cuero vegano elaborado con orujo: el residuo de la vinificación formado por pieles y pepitas de uva. Este cuero vegano, también llamado cuero vino, es producido en Italia por la empresa italiana sin el uso de solventes tóxicos para el medio ambiente o la salud humana. Vegea utiliza un alto contenido en materia orgánica, mientras que el resto de la composición es de origen sintético: 90% materia orgánica + 10% poliuretano.
A partir de cactus
Desserto es un innovador material textil hecho en México que lidera el cambio en Latinoamérica.
A partir de residuos de la oliva
Oleatex es un material fabricado a partir de los residuos de la oliva y cuenta con certificaciones del USDA como 63% y DIN como 91% de base biológica, haciéndola una de las alternativas sostenibles al cuero animal.
Materiales sostenibles para accesorios: materiales a partir de plantas
Estos tejidos se crean a partir de vegetación, como por ejemplo, el BananaTex Fabric, creado 100% de abacá obtenido de plantas de plátano cultivadas de manera natural en las tierras altas de Filipinas, dentro de un sistema agrícola y forestal sostenible. Estas plantas no necesitan pesticidas, fertilizantes ni agua extra, lo que las hace autosuficientes. Su cultivo ha ayudado a reforestar áreas previamente erosionadas por monocultivos de palma, al tiempo que mejora la biodiversidad y la economía local.
Otro ejemplo es Revoltech, que fabrica algunos de sus materiales a partir de fibras naturales de cáñamo que provienen de campos de cáñamo en Alemania.
Microfibra de alta resistencia
Una de las alternativas a la piel es la microfibra de alta resistencia. Este material es sintético, pero como ventaja podemos considerarlo como el material de mayor resistencia y calidad. Además, al ser monocomposición, a diferencia de los materiales cuya composición es una mezcla y no es posible reciclarlos, en este caso sí es posible reciclar el material al final de su vida útil.
Material orgánico con resinas
También existen materiales naturales que se mezclan con resinas para otorgar al producto mayor resistencia y acabados de mayor calidad. Este acabado es innovador ya que logra concretar un material duradero, biodegradable y libre de plásticos. Este es el caso de MIRUM, ya que está completamente libre de plástico y certificado como 100 % biológico. Este material utiliza exclusivamente ingredientes naturales, lo que garantiza su reciclabilidad al final de su vida útil, ya sea en la fabricación de bolsos, zapatos o cinturones. Por eso, es otra de las alternativas sostenibles al cuero animal.
Su producción se radica en Estados Unidos y está elaborada conscientemente a partir de una combinación de materiales naturales vírgenes y productos agrícolas reciclados. El gran inconveniente de este material es su precio, ya que es mucho mayor que cualquier otra alternativa, y a día de hoy hacer un complemento con este material solo lo pueden hacer grandes marcas de lujo.
Conclusión sobre alternativas sostenibles al cuero animal y la moda sostenible
En definitiva, para aquellas personas que prefieren evitar el consumo de productos de origen animal o prefieren alternativas más sostenibles a la piel, ya no hay excusa. Las innovaciones en materiales ecológicos nos ofrecen opciones variadas y respetuosas con el medio ambiente para la moda y los accesorios.